LA IMPORTANCIA DEL PODER LEGISLATIVO

Por Malú Kikuchi

Argentina es un país fuertemente presidencialista. Tiende a olvidar la importancia de los demás poderes. Sin embargo, la Constitución Nacional (1853) es sabia. Después de su primera parte, “Declaraciones, derechos y garantías”, que constituyen el alma y la razón de ser de Argentina, dedica su segunda parte a “Autoridades de la Nación”·

La segunda parte de la CN, “Autoridades de la Nación”, “Gobierno FEDERAL”, sección primera, comienza por el Poder Legislativo. Recién después de dictaminar sobre las funciones de las dos cámaras y establecer los deberes y derechos del Congreso, la CN pasa a la sección segunda, “Naturaleza y duración” del Poder Ejecutivo.

Primero el Legislativo, luego el Ejecutivo. Tiene una lógica absoluta. El Legislativo es plural, representa todas las opiniones de todos los ciudadanos. El Ejecutivo es unipersonal (artículo 87, “unipersonal” quiere decir UNO, no DOS) y representa a la mayoría o a la primera minoría, como sucede hoy.

Y el Ejecutivo, aunque al asumir deba gobernar para todos los habitantes, simpatizantes y opositores, no siempre lo hace. Ese equilibrio entre el oficialismo y la oposición, debe imponerlo el Legislativo.

Según la CN, los diputados representan a los ciudadanos y los senadores a sus respectivas provincias. Deben tener conciencia del cargo y de no hacerlo, deberán tener cargo de conciencia y la condigna pena.

Desde el 10/12/09, la cámara de diputados ha sido renovada en un 50% y el senado en un tercio. Si este nuevo Congreso asume su real importancia dentro del manejo del gobierno, si ejerce el poder que le da la CN de ponerle freno al Ejecutivo, se recupera en gran medida la República.

El kilómetro 0 de la Nación, el kilómetro 0 de la República, nace en el Congreso. Si los diputados y senadores comprenden en toda su dimensión que las rutas nacionales, esas que unen a todo el país, parten del Congreso y no de la Casa Rosada; la historia cambia.

El monolito del Kilómetro 0, obra de José Fioravanti del 2/10/1935, está situado en la Plaza Lorea, no en la Plaza de Mayo. Las rutas nacen en el Congreso, porque el Congreso es el centro de la Nación; el corazón plural de la Nación.